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BelAge Boisson la esperanza contra la insuficiencia renal
Transforma tu cuidado renal con este regenerador celular único. ¡Actúa hoy y redefine tu camino hacia la salud renal!
¡VIVE SANO! Asesor de bienestar
Transforma tu cuidado renal con este regenerador celular único. ¡Actúa hoy y redefine tu camino hacia la salud renal!
En la vanguardia de la salud renal, presentamos con orgullo BelAge Boisson, un regenerador celular excepcional diseñado para combatir la insuficiencia renal. Respaldado por una rigurosa investigación científica, este elixir revolucionario fusiona la innovación biomolecular con los secretos naturales de la regeneración celular. Cada sorbo de BelAge Boisson es un paso hacia la revitalización celular, brindando un apoyo crucial a aquellos que buscan fortalecer sus riñones. Los potentes antioxidantes y compuestos bioactivos trabajan en armonía para nutrir y regenerar las células, marcando un hito en la ciencia de la salud renal. En este artículo conoceremos un poco sobre la insuficiencia renal, los sintomas, causas, tratamientos y testimonios reales de clientes que utilizaron este innovador producto.
Testimonio del dr. Rosero, quien solicitó el producto para su madre, la cual ya pasaba por una serie de diálisis y ahora está sorprendido con los resultados. Ahora recomienda los productos a sus pacientes.
Entérate como pudo recuperar su salud el sr. GILBERTO, quien confió en SanKI y ahora vive su vida feliz y haciendo lo que más le gusta.
Luis Lauro Gonzales, un sobreviviente de cancer de riñon e insuficiencia renal crónica nos cuenta su impresionante testimonio de vida. Volvió a nacer con Sanki, quedate hasta el final del video y disfruta de sus testimonio.
Gisela Ginzales es una peruana agradecida con Sanki, porque gracias a esta marca y sus productos tiene calidad de vida y está mejorando dia a dia, revisa esta increible historia.
Impresionante testimonio de paciente con 21 años sufriendo de Diabetes, por exceso de medicamentos tuvo Insuficiencia renal Crónica a consecuencia Hemodiálisis. Gracias a Sanki su salud mejoró dráscamente.
Gregoria Trejo, una mujer que habia perdido hasta el hábito de caminar a consecuencia de los dolores intensos que padecia por la enfermedad, no podía defecar, se dializaba 3 veces por semana, creatinina y úrea elevada y en 15 dias ocurrió el milagro.
Impresinante testimonio, con mas de 30 años de sufrir de los riñones, 3 años de no poder orinar, tener la hemglobina en 7 y los niveles de fosforo, hierro, creatinina, urea altísimos y sin poder caminar, ahora hace su vida normal y ya comenzó a orinar, en solo 4 meses de tratamiento.
La medicina tradicional a menudo se centra en corregir problemas una vez que aparecen, pero nosotros creemos en un enfoque diferente. Creemos en la prevención y en mejorar la calidad de vida desde el nivel más básico.
Los riñones desempeñan un papel crucial como órganos depurativos en el cuerpo, siendo fundamentales para mantener una óptima salud. Por ende, es imperativo cuidar de ellos.
Evitar llegar al extremo de someternos a diálisis se vuelve esencial, y para lograrlo, es crucial comprender la actividad renal. Los riñones desempeñan un papel directo en la eliminación de toxinas y el exceso de agua; cuando esta función falla, nuestra sangre circula cargada de toxinas y un exceso de líquidos, provocando daños en otros órganos, aumento de la presión arterial, hinchazón, entre otros problemas. Por lo tanto, es de vital importancia mantener la salud renal como parte de nuestro bienestar general.
Los productos de Sanki, especialmente BelAge y Kronuit, juegan un papel vital en mejorar la microcirculación. Especialmente BelAge, actúan a nivel celular, centrándose específicamente en la actividad mitocondrial, ya que las mitocondrias son organelos clave en nuestras células. Estos productos buscan contrarrestar la oxidación celular que ocurre dentro de las células, desencadenando inflamación y generando cambios perjudiciales que, en el caso de los riñones, pueden conducir a un deterioro e incluso a la insuficiencia renal.
BelAge se destaca por su capacidad para reducir significativamente la oxidación celular, disminuyendo el proceso inflamatorio. Este efecto tiene como consecuencia la regeneración celular, donde las células dañadas son reparadas o reemplazadas, mejorando así los tejidos y restaurando el correcto funcionamiento de los riñones.
Es importante destacar que, a diferencia del hígado, los riñones tienen una capacidad de regeneración más lenta. Históricamente se ha considerado que son órganos incapaces de regenerarse, pero gracias a las fórmulas de Sanki, que trabajan a nivel celular, se ha logrado revertir esta condición. Estos resultados sorprendentes se han observado incluso en pacientes con Enfermedad Renal Crónica (ERC) en grado 4, demostrando la eficacia de los productos de Sanki en la mejora de la salud renal.
BELAGE: que nos van a ayudar a desintoxicar nuestras células y mitocondrias, generando una mejor expresión genética, más energía y efectos antiinflamatorios,
KRONUIT: protege nuestro estómago y nuestro cuerpo absorbiendo menos carbohidratos y azucares de los alimentos, es el primer antioxidante gástrico.
Estudios clínicos han demostrado que el uso del BelAge cuando se toman durante un período sostenido, contribuye a aumentar significativamente la producción de antioxidantes primarios, reducir la inflamación crónica y mejorar la salud celular en pacientes con insufiencia renal. Estos también mejoran la calidad de vida y el bienestar general de los pacientes.
Los riñones son un par de órganos ubicados en la parte inferior de la espalda, a ambos lados de la columna vertebral. Tienen la importante función de filtrar la sangre, eliminando las toxinas y los desechos del cuerpo. Estos desechos son transferidos a la vejiga y, posteriormente, son expulsados del cuerpo a través de la orina.
La insuficiencia renal, también conocida como crónica renal (ERC), es una condición grave que afecta la capacidad de los riñones para filtrar y eliminar los desechos y el exceso de líquidos del cuerpo. Esta enfermedad puede desarrollarse lentamente durante un período de años, a menudo sin síntomas evidentes en las etapas iniciales. En este artículo, exploraremos las causas, los síntomas y los tratamientos de la insuficiencia renal para crear conciencia sobre esta importante cuestión de salud.
La insuficiencia renal ocurre cuando los riñones pierden su capacidad para filtrar eficientemente los desechos de la sangre. Esta condición puede ser causada por diversos factores que afectan la salud y función renal, tales como:
La diabetes crónica es una de las principales causas de insuficiencia renal. El alto nivel de azúcar en la sangre puede dañar los vasos sanguíneos y los riñones.
La hipertensión arterial crónica puede dañar los pequeños vasos sanguíneos en los riñones, reduciendo su capacidad para filtrar adecuadamente.
Las enfermedades cardíacas pueden afectar el flujo sanguíneo a los riñones, causando daño renal.
Trastornos autoinmunitarios como el lupus pueden afectar los riñones y llevar a la insuficiencia renal.
El uso prolongado de ciertos medicamentos, como los antiinflamatorios no esteroides (AINE) o analgésicos, puede dañar los riñones.
Un grupo de síntomas que incluyen pérdida de proteínas en la orina, aumento y niveles elevados de colesterol. Puede ser causa
Algunas condiciones genéticas, como la poliquistosis renal y la enfermedad renal poliquística autosómica dominante, pueden provocar insuficiencia renal a medida que progresa la enfermedad.
La obstrucción de las vías urinarias debido a cálculos renales, tumores o agrandamiento de la próstata puede dificultar el flujo normal de la orina, lo que eventualmente puede dañar los riñones.
Infecciones crónicas o recurrentes del tracto urinario pueden dañar los tejidos renales con el tiempo, lo que lleva a la insuficiencia renal.
Traumatismos, cirugía mayor, shock o insuficiencia cardíaca pueden provocar una rápida disminución de la función renal, lo que se conoce como lesión renal aguda.
En las etapas iniciales, la insuficiencia renal puede no presentar síntomas obvios. A medida que la enfermedad progresa, pueden aparecer señales como:
Los tratamientos pueden incluir cambios en el estilo de vida, como una dieta baja en sodio y control de azúcar en la sangre, así como medicamentos para controlar la presión arterial y proteger los riñones.
La prevención es fundamental y puede implicar mantener una dieta equilibrada, hacer ejercicio regularmente, controlar el azúcar en la sangre y la presión arterial, así como evitar el consumo excesivo de medicamentos sin supervisión médica.
En casos más graves, se pueden necesitar diálisis o trasplante renal para mantener la función del riñón. La diálisis es un procedimiento vital para las personas que sufren de insuficiencia renal crónica, ya que sus riñones no pueden realizar adecuadamente la función de filtrado y eliminación de desechos del cuerpo. Este tratamiento es esencial para mantener la salud y calidad de vida de quienes padecen esta condición. A continuación, profundizaremos en los distintos tipos de diálisis, las consecuencias de la insuficiencia renal, las razones por las que se llega a este punto y la función crucial que cumple la diálisis en estas circunstancias.
Diálisis Peritoneal:
Este proceso implica la extracción de la sangre del cuerpo y su paso a través de un filtro especial llamado dializador. Aquí, las toxinas y los desechos son eliminados antes de que la sangre regrese al cuerpo. La hemodiálisis generalmente se realiza en un centro especializado de diálisis varias veces a la semana y requiere la inserción de un catéter o la creación de un acceso vascular, como una fístula arteriovenosa.
Diálisis Hemodiálisis:
En este tipo de diálisis, se utiliza el revestimiento abdominal (peritoneo) como filtro natural. Un líquido de diálisis especial se introduce en el abdomen, donde absorbe los desechos y el exceso de líquido del cuerpo. Posteriormente, este líquido se drena, llevando consigo los desechos. La diálisis peritoneal se puede realizar en casa y ofrece más flexibilidad para los pacientes, ya que se puede hacer durante la noche mientras duermen.
Las sesiones de diálisis pueden causar algunos síntomas y efectos secundarios, que varían de persona a persona. Algunos de los síntomas comunes después de la diálisis incluyen:
La diálisis puede ser extremadamente agotadora, y muchos pacientes se sienten cansados después de una sesión.
Durante la diálisis, los pacientes pueden experimentar una disminución en la presión arterial, lo que puede llevar a mareos o sensación de debilidad después de la sesión.
Algunos pacientes pueden sentir náuseas o incluso vomitar después de la diálisis. Esto puede estar relacionado con los cambios en los niveles de electrolitos y deshidratación durante el procedimiento.
Los calambres musculares y el dolor en las piernas son síntomas comunes después de la diálisis, especialmente en pacientes que han experimentado una disminución significativa en los niveles de potasio durante la sesión.
La diálisis puede provocar deshidratación, lo que puede llevar a una sensación de seda excesiva después del procedimiento.
Algunos pacientes pueden experimentar dolores de cabeza después de la diálisis, posiblemente debido a cambios en la presión arterial y los niveles de líquidos.
En la diálisis peritoneal, al utilizar el revestimiento abdominal como filtro, algunos experimentan calambres abdominales después de los intercambios de líquidos.
La diálisis puede afectar los niveles de electrolitos en el cuerpo, lo que puede llevar a síntomas como debilidad muscular, confusión o ritmo cardíaco irregular.
La deshidratación causada por la diálisis a veces puede llevar a una sensación de picazón en la piel.
Después de la diálisis, algunos pacientes pueden experimentar cambios en el apetito, ya sea aumento o disminución del hambre.
Algunas personas encuentran dificultades para conciliar el sueño después de una sesión de diálisis debido a la incomodidad o los síntomas que experimentan.
La insuficiencia renal no tratada puede llevar a una serie de complicaciones graves, incluyendo desequilibrios electrolíticos, acumulación de toxinas en el cuerpo, presión arterial alta no controlada, anemia y daño en otros órganos. Estas complicaciones pueden tener un impacto significativo en la calidad de vida, la capacidad para trabajar y la función general del cuerpo, llegando lamentablemente a la muerte.
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